El autobús es un medio de transporte utilizado diariamente por millones de personas en el mundo, pero ¿sabemos cuándo aparecieron los autobuses?

 

Autobús tirado por caballos

El autobús como transporte público aparece en el año 1826 en la ciudad francesa de Nantes. El dueño de unos baños públicos, Stalislav Baudry, tenía la necesidad de desplazar a sus clientes desde el centro de la ciudad hasta su establecimiento situado en las afueras. De esta forma, solicitó una autorización municipal y montó un medio de transporte tirado por caballos que conectaba la región central con la zona de Richebourg, que era donde se encontraba su propiedad.

Lo curioso, es que el recorrido de los autobuses acababa cerca de la sombrerería de Monsieur Omnès, quien con un juego de palabras terminó llamando a su tienda “Omnes Omnibus”. De hecho, Omnès suena como la palabra latina omnes que significa todos y onmibus para todos. Este hecho, provoco que poco a poco los ciudadanos terminaran popularizando el término de ómnibus al medio de transporte.

Tanto fue el éxito que acabó teniendo, que el propio Stanislav Baudry decidió cerrar su negocio de baños públicos y se dedicó exclusivamente a continuar con su idea de una forma de transporte colectivo. Así, en 1828 fundó en París la compañía Enterprise Générale des Ómnibus. De todas formas, aunque la idea había sido toda una novedad, finalmente se convirtió en un gran fracaso.

 

Autobús movido a vapor

Al igual que en París, en otras zonas se estaba gestando la idea de un transporte para varias personas. En 1931, el inglés Walter Hancock creó en su país el primer autobús a vapor bautizado Infant. En este primer modelo cabían 10 personas y se realizó un trayecto experimental de Stratford a Londres.

 

Autobús con motor de gasolina

Después, el autobús movido a vapor fue reemplazado por otro modelo que contaba con un motor a gasolina de un cilindro, transmisión de cadena y ruedas cubiertas de goma. Este invento fue creado por la firma alemana Benz y comenzó a estar en funcionamiento el 18 de marzo de 1895 en una línea que realizaba un recorrido a 15 kilómetros al norte de Renania. Así, este viaje cubría la ruta entre Netpen y Deuz llevando de 6 a 8 pasajeros con una velocidad media de 15 kilómetros por hora.

La necesidad que tenían las fábricas de la zona para transportar a sus trabajadores provocó que la idea tuviera éxito y fue en este momento, en el que se pasa a utilizar el autobús con motor de gasolina, cuando se empieza a emplear el término autobús.

Después, la idea se extendió a otros países como Francia que inauguró su primera línea el 11 de junio de 1906 con un trayecto de 5.8 kilómetros entre y Saint-Germain-des-prés.

Posteriormente, Benz fue creando diferentes modelos de autobuses y poco a poco aparecieron otras marcas en el mercado que fueron diseñando otras versiones hasta el autobús que se conoce hoy en día.